viernes, 7 de septiembre de 2012

La Hipotermia en la Natación de Larga Distancia.

HIPOTERMIA EN LA NATACIÓN DE AGUAS ABIERTAS Y LARGA DISTANCIA.

Gracias al Blog de mi amigo Eugenio Miralles (http://www.alaguamasters.com/), ha llegado a mis manos esta interesante lectura que os paso a continuación.
Trata sobre la hipotermia, y sobre esta cuando se produce en nuestro medio, en el agua.
En mi caso, en verano pasado, entrenando en Oeiras POR, cerca de Lisboa, para preparar el cruce del Estrecho de Gibraltar, pase un caso muy parecido. Nadaba junto a Joana Cunha, sin ayuda del neopreno, ni de lanolina o vaselina, y con el agua a unos 15 o 16 grados. Además el día estaba con algo de viento, y según estábamos nadando, se nublo. Nadamos alrededor de una hora, y recuerdo que volviendo hacia donde habíamos salido, iba totalmente perdido. Pero no por que no encontrase el camino, sino por que iba como soñando. Tenía mucho mucho frio, no recordaba donde estaba, ni por que estaba nadando, aunque reconocía a Joana, que nadaba conmigo, no entendía como ella iba más rápido que yo, y a mi me costaba seguirla. No recuerdo como, pero me ya de pie sobre la arena de la playa, donde aun confundido, el socorrista nos dio nuestra ropa, y aturdidos y sin hablar, nos fuimos al coche de Joana, donde nos metimos, pusimos la calefacción a tope, y creo que 45min después, o una hora, fue cuando empezamos ha hablar sobre lo que había sucedido…

INTRODUCCION DE EUGENIO MIRALLES:
D. Javier Sanz, una de las pocas personas que es capaz de compaginar dos cosas bastantes complicadas como son la Presidencia de un gran club (CN Alcobendas) y el ser un excelente deportista en activo sobre todo de ultramaratones acuáticas (con las horas de entrenamiento que ello conlleva), nos escribe su experiencia sobre la I ultramaratón del Ebro relacionada con el peor enemigo del nadador de travesías: la hipotermia. Desde aquí agradezco a Javier el que comparta con todos nosotros su experiencia (yo sé personalmente que es ser rescatado por hipotermia e identifico completamente todo lo que se cuenta en este artículo)

RELATO DE JAVIER SANZ:
"Hoy debería estar escribiendo una exitosa crónica sobre la primera ultra maratón acuática del Ebro, 30830m, pero no lo haré, tomé la difícil decisión de abandonar en el km26 cuando iba en novena posición, creo que son los finalistas, dignos merecedores de relatar el acontecimiento.

Yo escribiré sobre el enemigo oculto , como asi se le conoce a la hipotermia entre los nadadores de aguas abiertas. La frase "me muero de frío " es frívola cuando muchos grandes nadadores han muerto por hipotermia. ¿como es posible? Tal vez los menos expertos identifican la hipotermia con nadar en los grandes cruces como el Canal de la Mancha, Lago Ness, Santa Catalina o con un océano rodeado de iceber. Pues bien, creo poder asegurar que todos los que leen esto que escribo han pasado una o más hipotermias. Es cierto que existen varias fases en esa pérdida de calor corporal y conocerlas y sobre todo identificarlas puede salvarte la vida.

La normativa en piscinas por lo general nos dice que el agua debe de encontrarse entre 25 grados y 29 grados centígrados, a 27 grados los usuarios suelen transmitir sus quejas... El cuerpo humano se encuentra aproximadamente a 36 grados y medio. Los escalofríos que todos hemos sufrido alguna vez o la piel de gallina se produce cuando la temperatura del cuerpo desciende. En el agua la pérdida de calor corporal se acentúa llegando a ser 30 veces mayor que en el exterior, el viento multiplica la acción del frío por 10, la humedad por 14. En aguas a 15 grados centígrados una persona puede permanecer con vida entre una hora y seis dependiendo de su constitución, temperatura del aire y sol. No es necesario decir que sin el calor del sol los tiempos se reducen. Las zonas del cuerpo más vulnerables son la cabeza y los pies. La hipotermia en aguas abiertas produce tantos muertos como ahogamientos y el aire frío agrava la situación.

En náutica la mitad de los ¡hombre al agua! acaban en tragedia. Es algo serio y debemos conocer e interpretar las señales de nuestro cuerpo.

Primeras alarmas: dejando a un lado los temblores que todos conocemos las primeras alarmas que sentiremos durante nuestro nado además del frío en brazos y pies es un aumento del ritmo cardiaco que a menudo no notamos y menos en competición. Sí es frecuente entrar en un nado monótono que nos produce somnolencia, las manos se endurecen y se hace complicado realizar una movilidad compleja con los dedos, lo podemos observar al abrir un gel durante un avituallamiento. Si el nado continua sin pausa podemos seguir sin ser conscientes de que nuestra temperatura corporal a descendido 2 grados. Entrados en esta fase las reacciones de nuestro cuerpo es diferente dependiendo de cada individuo , hay quienes sienten calor y aparente mejoría. El cuerpo resta bombeo sanguíneo a partes del cuerpo menos vitales como orejas, nariz, dedos para llevarlo al resto de los órganos vitales. Se aprecia palidez y amoratamiento y ya el afectado coordina con dificultad y no habla bien, balbucea y le cuesta pronunciar, yo llegaba incluso a morderme al hablar, confusión. Llegado a este punto la organización del evento o cruce siempre saca al nadador, la pérdida de calor continua incluso habiendo salido del agua. Nunca quitar el gorro que aún nos calienta, secar al nadador y ponerle en posición fetal. Una manta térmica no debe faltar nunca en una embarcación. Bebida caliente pero nunca alcohólica, ya que produce dilatación de los vasos sanguíneos, lo que conlleva una perdida de calor. Té caliente con miel es lo que yo recomiendo. Mantener al paciente arropado y seco retirarle ya el gorro y el bañador. No dejar solo al afectado que a menudo se queda dormido, frotar sus manos y pies intercambiando calor.

Si la temperatura del afectado no sube de 35 grados se debe llevar al nadador al servicio médico de urgencias. Los profesionales serán entonces los que valoren la situación de riesgo y el calentamiento puede ser mediante inmersión en agua a unos 38-40 grados centígrados. Ha de reponerse el líquido perdido con perfusión de soluciones salinas equilibradas y plasma.

La mortalidad en nadadores de edad avanzada se eleva al 80% ,por este motivo en triatlón está permitido el neopreno en los grupos de edad más veteranos. La normativa FINA en aguas abiertas o las normas en los diferentes cruces oceánicos son más radicales y prohiben el uso del neopreno, solo pudiendo utilizar un bañador de corte clásico, un único gorro y gafas. Eso sí, el uso de lanolina y grasas en el cuerpo es de uso frecuente aunque mi experiencia me dice que no dura mas allá de una hora aunque lo recomiendo como elemento placebo. Debemos ser consecuentes con nuestros retos y nunca nadar solos. 
El primer nadador muerto en el canal de la Mancha fue un Español que se aventuró a cruzarlo sin asistencia,nunca apareció. Noticias de ahogados cruzando un pantano es frecuente por desgracia aún hoy. Nadaba muy bien dicen los amigos...

Es el enemigo oculto y está ahí fuera y en el agua es muy peligroso. La decisión de abandonar un cruce o travesia antes de llegar a una situación extrema aun siendo dolorosa a de ser tomada positivamente aunque personalmente lo llevo muy mal. Trabajar la aclimatación nadando en aguas frías aumentando los tiempos de permanencia y el aumento de la grasa corporal,una alimentación e hidratación antes y durante la prueba son sinónimo de mejora en el tiempo de permanencia en aguas frías y de éxito. ¡Nos vemos en el agua!". Javier Sanz.

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